2010

"BIENVENIDO A MI BLOG"

6 de noviembre de 2021

TRAVESÍAS DEL TIEMPO

 

Mi brazo es una calavera

Y tú eres vida

¿Quiéres un frío refugio para tus sueños?

Mis versos ya no arderán en tus labios

Mis manos ya no dibujan

Paisajes de colores.

Mi voz está convulso

Y tú

Eres una lluvia de pasiones

Un fuego volcánico

Que deslinda con mi alma

Vacía

No esperes una caricia delirante de mis 

Pupilas

Atesora los recuerdos en tus libros

Y enciende el navío

Que te espera

En el mismo rincón donde

Nacimos con el primer

Beso.

*****

Autor:

Trilce Aldeano 

Edición y publicación 

María del Carmen García Guerrero 

Bogotá - Colombia. 


Todos Los Derechos Reservados 


14 de octubre de 2021

La Montaña sin Nombre.

 "Tú allá, en la sabana de mil colores, yo aquí en el camino azul sin pincel y sin espera".

Trilce Aldeano

*****

Ya somos en el recuerdo 

dos silencios

Las miradas lejanas y la historia libre

La libertad de las nubes

el vuelo que se oculta 

en el espejo difuso 

de un libro.

Las victorias de una pluma que observa desde arriba 

Nuestros pasos terrestres

nulos y sin camino.


No soy la mañana tranquila 

que se aferra al crepúsculo 

a la música suave de tu silencio 

No soy la pluma vespertina

en el café 

ni la hora de la siesta en tus ojos

Somos dos horizontes en la misma montaña 

Mágicos en su vuelo 

En el silencio y la espera. 

Autor:


Trilce Aldeano 


Todos Los Derechos Reservados 

Lima 2021 Octubre. 



17 de septiembre de 2021

TRAVESÍAS INMORTALES: Oppenheimer y Las Uruguayas

 


Descubrí a Andrés Oppenheimer en Viña del Mar - Chile, en un viaje casi de peregrinación intelectual; en el café de la calle O'Higgins. Dos muchachas uruguayas conversaban de política y al escuchar la alturada argumentación filosófica me uní a su comparsa dialogatoria y súbitamente ya estaba entre la pupilas curiosas de también viajeras. — ¿Has leído a AO? La pregunta de Sandra puso en alerta mi vanidad de lector agudo y rápidamente negué mi desconocimiento. — Te lo recomiendo y te obsequio este ejemplar. No era la primera vez que me regalaban un libro pero la sonrisa de Luana elevó mi perversión metafísica a tal punto de decirle que he explorado todo de AO pero mi pasión y amor por las bibliotecas me hizo retroceder de la que pudo ser la mentira más cruel de mi historia. —  ¿Para qué describir...? Diría Arjona. Todo lo que vino después de esa aventura fue sumergirme en la filosofía latinoamericana, tenía que estar presto para cuando las muchachas uruguayas visitasen a la tierra de Efraín y María; cuyo fulgor pictórico enaltecido por mi voz Se quedó en la retina de mis amigas.  — Pronto nos veremos en Cali. Fue la frase final de esa gran travesía inmortal. 


*****

Trilce Aldeano

8 de septiembre de 2021

NOCHES TACITURNAS: El Balcón Nocturno.



*****

Llueve

Mi sangre se cae, va rodando como amapola en setiembre 

Un ocho exactamente 

Ese mismo día que busco 

Un brazo que se lleve mi culpa.

Mi corazón milenario

Escapa de su fuente y la sed

Me acaba, me hace agonizar 

Me culpa como cada uno

De mis dedos

Como mis ojos sombríos y

Toda la tesitura de mi cuerpo 

Nada se acaba y mi voz

Se enreda en el río 

La lluvia no cesa en mi corbata 

Un ocho o nueve 

¡Qué importa!

Llueve y no me asomo ver

Si sus ojos no claudican 

Nervo escribía a su Amada inmóvil 

Y, yo aquí nadando en el mismo río, 

Esperando que la lluvia 

Se vaya y me deje en este balcón nocturno 

Donde lluevo y soy río. 


*****


Autor: 


Trilce Aldeano 


Todos Los Derechos  Reservados.


🍷🍷

19 de agosto de 2021

NAVEGAR RÍO ARRIBA

 

La Memoria del Olvido: Héctor Béjar y los marinos.

*****

Ayer, fueron los jefes de las Fuerzas Armadas a Palacio de Gobierno, no sabemos qué le dijeron al presidente Pedro Castillo; unas horas después, el doctor Héctor Béjar renunció al Ministerio de Relaciones Exteriores, 19 días después de jurar el cargo, y dos antes de asistir a la sesión de interpelación en el Congreso, antes que el gabinete exponga sus planes. Frente a los congresistas de todas las derechas unidas y la minoría, del partido Perú Libre, Béjar habría podido describir los hechos en los que basa su afirmación sobre la Marina como iniciadora del terrorismo en Perú, desde 1977; hechos que no fueron inventados por él y que están consignados en uno de los WikiLeaks (filtración de información), una investigación periodística de la revista Caretas a cargo de César Hildebrandt, y también en la condena del expresidente Morales Bermúdez en Italia por la participación del gobierno de las Fuerzas Armadas en el Plan Cóndor. Por otro lado, Béjar habría podido abrir un debate sobre lo que puede ser una política exterior del país fuera del Acuerdo de Lima, ese que tiene tan felices a las derechas.

Con la renuncia, las derechas unidas y las FF AA logran una pequeña victoria en el sendero que les llevaría a más triunfos con las renuncias o censuras de otros ministros considerados indeseables y, más temprano que tarde, con la caída del propio presidente Castillo. Basta oír al congresista Jorge Montoya -almirante retirado de la Marina, y cabeza de fila de esas derechas unidas- un día sí y otro también, para enterarnos de lo que quieren, anunciando uno a uno los pasos que dan para alcanzar sus objetivos. Sobre ese horizonte, la prensa concentrada y aliada hace su trabajo para evitar que el Perú tenga por primera vez en la historia un gobierno salido del pueblo. Corre grave peligro la esperanza renacida gracias al profesor presidente, con su color de la tierra, su sombrero, su lápiz y su hablar sencillo.

Oí, esta mañana, una conversación de los periodistas Mónica Delta y Fernando Carvallo con el congresista Jorge Montoya en Radio Programas del Perú, RPP-“la voz del Perú”. Sostuvo el marino retirado que los periodistas no debían preguntar ni interesarse por lo que pasó hace cuarenta años, que solo importaba hablar del presente y cuidado con la intocable imagen de la Marina. Volvió a aparecer en esa conversación el viejo e interminable conflicto entre el poder y sus víctimas, entre la memoria y el olvido de unos contra otros, conflicto que existe en todas las sociedades humanas desde algunos miles de años. En la orilla del poder se busca el olvido; en la orilla de las víctimas de ese poder, se busca la memoria. Por el ejercicio constante de la memoria pasa el camino de la libertad; por el olvido del pasado, trata de mantenerse la aparente buena conciencia de los que tienen el poder.

Como todos los seres humanos, el congresista Montoya recuerda, tiene una memoria selectiva; quiere borrar del pasado lo que no le gusta, prefiere el presente y el futuro. Aunque quiera, no puede dejar de recordar; su propia memoria lo traiciona cuando en defensa de su actual posición, apela a un argumento en el pasado: Héctor Béjar “fue un guerrillero comunista” y ese hecho sería suficiente para impedir que sea ministro. Al citar ese recuerdo, olvida que Héctor Béjar, fue también durante aproximadamente 4 años, entre 1970 y 1975, un funcionario del gobierno de las FF AA. ¿Cómo explicaría que la FF AA de esos años contaran con un guerrillero comunista como funcionario y no quieren ahora que sea ministro del presidente Castillo? Me hubiera gustado que los periodistas le hicieran esa pregunta. Quién sabe si, tal vez, tampoco ella y él recuerden o quieran recordar ese hecho.

Escribí antes y repito ahora que Héctor Béjar no fue nunca un terrorista y tampoco tuvo nada que ver con Sendero Luminoso; agrego hoy, que como Vargas Llosa, Béjar antes de ser guerrillero fue miembro de la juventud del Partido Comunista, en la misma célula del papá de Ollanta Humala; que Vargas Llosa hizo una defensa de los guerrilleros peruanos del ELN y el MIR en un pronunciamiento de escritores en Paris, en 1965, y que, en 1966, cuando yo estaba en Paris, lo oí defender con fuerza y admiración a Hugo Blanco en su discurso pronunciado en una jornada de solidaridad con el Perú, presidida por Jean Paul Sartre, para pedir que no lo condenen a muerte. Menciono a Vargas Llosa porque hoy es aliado intelectual y político mayor de las derechas unidas del país. Como todos los seres humanos no somos los mismos siempre, dejamos de cambiar solo cuando las vidas se acaban. Es tan frecuente en el mundo político que muchos pasan de la orilla de las izquierdas a la orilla de las derechas (lo inverso parece imposible). Es el caso de Vargas Llosa, no el de Béjar.

Terrorista es un acto en el que uno o más individuos matan o hieren u ordenan matar y herir con plena consciencia de lo que hacen, a personas inocentes (niños, mujeres, ancianos, adultos) con el propósito de atacar a sus enemigos y de advertir a los habitantes de un país que si se comprometen con sus enemigos correrán la misma suerte. Todo acto terrorista provoca miedo y pánico. El anonimato asegurado por máscaras diversas, por la voluntad de borrar las huellas y la protección de quienes los envían a cometer esos crímenes y delitos, son parte constitutiva de los actos terroristas, los que, en la historia son muchísimos. Terrorista es también el individuo, hombre o mujer, que comete el acto descrito u ordena que otros lo hagan. Fueron terroristas quienes ordenaron y produjeron la destrucción de las ciudades de Hiroshima y Nagasaki en Japón, usando bombas atómicas, por primera vez. La destrucción de las torres de Nueva York en 2001 fue otro acto terrorista brutal producido por los suicidas árabes; no tardó la respuesta norteamericana con el mismo terrorismo en la invasión de Irak.

En tierras nuestras, fueron terroristas quienes mataron a miles de campesinos indígenas quechuas en Huanta, arrojando los cadáveres en las cunetas de las carreteras o en pequeñas quebradas; fueron terroristas los que volaron torres eléctricas, mataron en calles o en sus casas a militares, dirigentes sindicales, políticos, abogados, estudiantes. Fue un acto terrorista el crimen del profesor y nueve estudiantes de la Cantuta, así como la respuesta senderista en la calle Tarata; también el crimen de la calle Huanta en Barrios Altos, a un grupo de migrantes que nada tenían que ver con Sendero Luminoso. Todos los actos terroristas que menciono y centenares más están debidamente documentados en el Informe Final de la Comisión de la Verdad de 2003.

Una primera conclusión es simple: no hay un terrorismo, hay dos. Lectoras y lectores, con la experiencia que tienen vuelvan los ojos sobre nuestra realidad y vean qué actos son terroristas y cómo unos correspondieron al Estado y otros a organizaciones como Sendero Luminoso. Por honradez personal, intelectual y política, estamos obligados a ver los dos terrorismos al mismo tiempo, con una perspectiva esencialmente crítica que nos conduce a condenar los terrorismos vengan de donde vengan, sin ambigüedad alguna.

Hoy no vemos ni sufrimos en Lima o en algún lugar del país voladuras de torres, destrucción de cooperativas, militares, políticos, dirigentes sindicales, mujeres dirigentes del vaso de leche; ya no hay matanza de alpacas preñadas en cooperativas, ni ganado fino forzosamente vendido en el camal de Yerbateros. Ya no sabemos de cartas anunciando a gamonales que se salvaron de la Reforma Agraria de 1969 que se vayan y no vuelvan; tampoco de los “ajusticiamientos” de aquellos que no obedecieron las órdenes propuestas en esas cartas. Ya no hay paros todos los días, tampoco paros armados, apagones, ni la angustia de saber que nuestros hijos podrán o no volver a casa. Lo que acabo de recordar era parte de la práctica de Sendero Luminoso; digo bien, era, porque Sendero Luminoso ya no tiene la vida de antes. Repito, una vez más, Sendero empezó a desaparecer cuando Abimael Guzmán llamó a sus dirigentes nacionales a una reunión en Lima, promovida por Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos, para informarles que la guerra había concluido y que a partir de ese momento la tarea era la pacificación, sacarlo de la cárcel y hacer política pública. Un grupo de sus militantes creyó que esa versión era falsa y decidió seguir en la lucha, en el Vraem y declaró traidor a Abimael, formó un partido propio; otro grupo formó el Movadef encargado de construir el movimiento político electoral que Abimael quería para lograr su libertad; lo más probable es que la mayoría de los militantes decidió abandonar la lucha, esconderse y camuflarse. Por las tres vías, una segunda conclusión resulta inevitable, el Sendero Luminoso que conocimos desapareció; el Movadef ha sido reprimido duramente y, tal vez, quede muy poco o nada de él.

Las Fuerzas Armadas saben mejor que nadie que en el Vraem ya no quedan senderistas sino remanentes de aquel grupo que declaró traidor a Abimael en 1992, que han perdido casi todos sus dirigentes y que están muy ligados al narcotráfico, primera fuerza en todo el Vraem. Saben también que Héctor Béjar no fue nunca senderista. La pregunta inevitable es ¿por qué si tienen las evidencias de esta realidad continúan hablando de la amenaza senderista, asustando a los incautos? Solo los jefes pueden responder, pero hasta ahora no dicen una palabra.

Queda, finalmente, un argumento más del marino-parlamentario-portavoz de las derechas unidas Jorge Montoya: en muchas entrevistas televisivas y radiales, sostiene que el gobierno de Castillo es comunista, que quienes no piensan como él son comunistas, que el peligro comunista amenaza al país, como el comunismo de Venezuela, Nicaragua y Bolivia. Decir que estos tres países son comunistas es simplemente una tontería que no merece ser comentada. Al mismo tiempo, el marino afirma que China es un país capitalista. Como dicen los brasileños: “no da para entender”.

Con el naufragio de la URSS, el comunismo sufrió una gran derrota. Quedan de lo que en otro tiempo fue: el Partido Comunista Chino que gestiona el desarrollo capitalista en su país y va camino a ser una potencia, no precisamente comunista; Corea del Norte, donde sobrevive la ilusión dentro de una especie de isla artificialmente sellada por muros metálicos, que no sabemos cuánto durará; finalmente, Cuba, aquella de la ilusión y el romanticismo revolucionario con Fidel y el Che, el ejemplo de guerrillero contrario a toda forma de terrorismo; la Cuba- Cubita de los años sesenta y setenta del siglo pasado, que enfrenta hoy, tal vez, la peor de sus crisis porque la distancia entre el aparato del gobierno y su pueblo es ya visible, si leemos las imágenes de la protesta del 11 de julio. Su ejemplo en educación, salud y deporte no pueden ser negados de modo alguno.

Una tercera conclusión es muy sencilla: el peligro comunista pasó a mejor o peor vida, ya no existe. Otra pregunta inevitable es ¿por qué el señor Jorge Montoya y las Fuerzas Armadas siguen levantando las banderas de la amenaza comunista? Ya sabemos que lo hacen para asustar, pero esa amenaza está roída, descolorida, agrietada y le queda un último cuarto de hora. Entiendo que quienes dirigen esa derecha llamada bruta y achorada no entienden de qué se trata y no tengan explicación alguna ni otra propuesta. Si entre la nueva derecha que asume, por fin, su identidad, hay alguien o alguna por ahí que empieza a pensar en el país, debería darse cuenta de que el enemigo ya no es ni puede ser el comunismo, ni sus partidos en cada país, sino el pueblo mismo. Tal vez es esta la lección mayor de los 19 días de un gobierno en el que, por primera vez, las derechas no tuvieron nada ver.

*****

Rodrigo Montoya Rojas 


Lamula.pe

13 de mayo de 2021

DESVELOS EN EL SILENCIO: Las Alas del Tiempo III

 

Un libro tentó  mis sueños

Quise olvidarme de la vida

Tuve defectos que me liberaron 

De mis represiones 

Otro libro me empujó  al olvido 

De los malos pasos.


La vida oculta la virtudes del hombre 

Enaltece sus defectos en la sombra 

Un libro, otro libro y más  libros 

Pueden  salvarte de la ignominia 

Yo he vivido tentado siempre. 


¿El que  nada lee nada Tiene?

Borges tenía  la respuesta 

Yo sigo tentado por las páginas 

Mi sangre se vinifica y mi alma

Enamora  a las dóciles muchachas 

Que ratonean en las bibliotecas. 

*****

Autor:

Trilce Aldeano

Todos Los Derechos Reservados 


Edición: María  del Carmen García Guerrero 

Bogotá - Colombia MMXXI -Mayo

5 de enero de 2021

NOCHES TACITURNAS: El Camino

 



Vuelo

El camino se libera del tiempo

Un libro me ofrece su cariño

Una aventura que enciende un sueño.


Vuelo

El camino es taciturno, melancólico...

He bebido los recuerdos en una historia

Otro libro me pregunta si lloro alguna ausencia.


Vuelo

El camino es un océano silente

Hoy estoy de fiesta y nadie canta

Un 5 de enero los halcones bajan a saludarme.


Vuelo

El camino, un libro, una aventura

Una copa vacía y los sueños encendidos

El ala quebrada y la pluma caliente

Evoco tu ternura en un verso.


*****


Trilce Aldeano


Todos Los Derechos Reservados


Lima 2021 Enero